miércoles, 23 de enero de 2013

Jaime Nevado: “Mi música también es revolucionaria, es guerrillera, nace en el combate” por Dax Toscano

Poetas, cantores y combatientes revolucionarios: Jaime Nevado y Jesús Santrich

“Yo no canto por cantar ni por tener buena voz, canto porque la guitarra tiene sentido y razón”, dijo el cantor revolucionario Víctor Jara, asesinado por los fascistas en Chile.

Jaime es de la estirpe de Víctor y, por supuesto, de la de Alí Primera, el cantor del pueblo venezolano y latinoamericano.

Todos ellos, de estirpe bolivariana, forjada al calor de las luchas del pueblo indoafroamericano para alcanzar la independencia del colonialismo y el régimen opresor y explotador, impuesto por el imperialismo yanqui y las oligarquías criollas.   

El “Cantor Guerrillero”, el “Cantor Fariano”,  combate con su canto al enemigo que aliena y embrutece la mente de la niñez y la juventud sometida a la basura que producen sus industrias discográficas y que la difunden a través de sus medios de incomunicación.

“Burgueses malparidos” escuchen el canto de Jaime Nevado:

Somos más los que estamos por la paz y la vida
Son pocos los que imponen la muerte y la perfidia
Vamos a desterrarlos de la faz de la tierra
Vamos a darle fin para siempre a esta guerra
Luego construiremos una Colombia Nueva
Con paz sobre la mesa, dignidad y conciencia
Donde empieza a brotar hay sonrisas de niños
Las deliciosas mieles que traerá el socialismo

Compañero Jaime Nevado, cuéntenos cuándo se integró a las FARC y en qué circunstancias

En mi país el Estado manda a asesinar a quienes piensan diferente al estamento. Yo pienso diferente al estamento; esa fue la circunstancia que me hizo integrar a las FARC-EP. Tenía que defender mi vida y luchar con las armas por un país diferente, más justo y soberano.

De dónde nace su inclinación musical y, en general, su vocación artística.

Mi vocación artística nace del hecho de pertenecer a una familia de actores y creadores de arte; y me inclino por la música cuando la escena social lo requiere. El arte y la música en general son medios de comunicación de masas, de crear conciencia revolucionaria. Son también, tribunas de denuncia. 


Quiénes son las personas que dentro del campo de la música son significativas para usted.

Los campesinos, los obreros, las madres que crían hijos para la lucha por la vida, los niños, las guerrilleras y los guerrilleros de las FARC. Sin estas personas, yo no sería músico.

Cuál es la música de su preferencia. A propósito de encontrarse en La Habana Cuba, qué piensa de la producción musical cubana: cha cha cha, mambo, rumba, son.

La música de mi preferencia es aquella que expresa con alegría la lucha de los pueblos por ser mejores. Sin importar el ritmo. Todos los ritmos autóctonos de las naciones son hermosos cuando están llenos de contenido humano. De contenido social. La música cubana es la expresión de esa alegría, que solo a 90 millas del imperio, teje su revolución con puntadas de cha cha cha, mambo, rumba, son y otras que nacen con sus nuevas generaciones.

Le gusta la música mexicana: Pedro Infante, Jorge Negrete o prefiere a un Luis Miguel

Se admira de la música mexicana el hecho de haberse difundido por todo el mundo. Jorge Negrete y Pedro Infante entre otros, fueron los que lograron imponerla, eran voces cultas y muy bien cultivadas. En la música mexicana así como hay contenidos machistas también hay música y canciones sumamente bellas. Me quedo con Negrete y con Infante. Luis Miguel es un reciclador. No hay en él creación musical. 

Qué piensa de estos nuevos géneros musicales como el hip hop o el regaeton. Cómo evitar que este tipo de música este vaciada de contenido, porque el regaeton, incluso el cubano, es ofensivo contra las mujeres por ejemplo.

Los medios de información masiva de las transnacionales no descansan en la misión de difundir toda la basura que ellos hacen producir a un grande sector de la juventud que alienan todos los días. Lo que produce la juventud pensante que no han logrado cooptar, no lo difunden ya que este sector ha logrado tanto en el hip hop como en el regaeton y en el rap plasmar una buena dosis de contenido social utilizándolo como tribuna de denuncia sobre los problemas que padecen, incluso invitando a organizarse contra los que imponen esa problemática. Los medios de comunicación alternativos deben apoyar estos sectores y divulgar sus trabajos ya sea a través de concursos, festivales, muestras, etc. 

Víctor Jara, el cantautor comunista chileno, dijo que su música no era de protesta, sino revolucionaria para darle una cualidad distinta. Usted que piensa de eso y cómo define a la música que usted elabora.

Casualmente por estos días dictaron orden de captura contra los asesinos de Jara, otro crimen del imperio que está en la impunidad. Yo pienso como Jara, la música no se debe quedar solamente en la protesta; esta, debe aportar elementos que despierten conciencia en el pueblo, conciencia revolucionaria que lo lleve a vincularse activamente en la lucha por una patria mejor, por un sistema diferente al capitalismo. En cuanto a mi música también es revolucionaria, es guerrillera, nace en el combate.

Cuál es su criterio de la música colombiana, puede hablarnos un poco de su historia. Y en ese sentido que piensa de la cumbia y la salsa. Usted baila salsa.

La música de mi patria en una trampa ha caído, y solo puede salvarla el pueblo que la ha parido. La música colombiana como toda la música de la patria grande que soñara Bolívar, es muy hermosa; nace al compás de las campañas libertadoras. Tiene un origen triétnico. El hecho de ser de origen nativo, negro y europeo hizo que esta combinación de culturas, generara una gran riqueza folclórica en ritmos y contenidos, lástima que los modernismos impuestos por el capital la estén aniquilando. Estoy seguro que ella, nuestra música, sobrevivirá y será el canto a la nueva sociedad. La cumbia es la expresión de nuestra Costa Atlántica, es muy bella, también sobrevivirá, ya que es la mujer caribeña vestida de música. La salsa no es nuestra, pero es igualmente bella. No bailo salsa, pero bailo cumbia.

Cristian Pérez y Julián Conrado. Puede hablarnos de sus letras, su música y de ellos como personas.

Todos los guerrilleros de las FARC-EP estamos dotados de una alta dosis de humanismo. Conocí a Julián y a Cristian por sus canciones y en ellas reflejan sentimientos nobles, sentimientos revolucionarios. Al ritmo de Cristian y Julián bailan obreros, campesinos, estudiantes, intelectuales y muchos sectores populares. Es música llena de alegría, de contenido, de vida.

Hay mujeres cantantes en las FARC-EP, compositoras, intérpretes
 
Si las hay, y muy talentosas; en Horizonte Fariano hay cuatro de 9 que conformamos el grupo, dos son compositoras. Nuestra hora cultural diaria nos dice que en las guerrilleras hay virtudes para la música. Debemos promocionarlas. Esperen gratas sorpresas.

Cómo lograr que la música y el arte se impliquen en el proyecto revolucionario
 
En las FARC lo hemos venido haciendo con grandes esfuerzos ya que carecemos de medios de difusión. El arte guerrillero debe llegar a las masas. La cultura la crea el pueblo trabajador, solo a él le pertenece y el pueblo la debe usar como instrumento de liberación.

Puede improvisar una estrofa dedicada a la paz con justicia social

La paz solo llegara
Cuando en mi patria querida
Haya justicia social
Siempre en la mesa servida.

Un mensaje a los jóvenes.  

A los jóvenes del mundo que el presente es de lucha contra lo inhumano que es el capitalismo y el futuro es de todos por un mundo mejor que es el socialismo.

La Habana, Cuba, enero de 2013

viernes, 18 de enero de 2013

lunes, 14 de enero de 2013

Camila Cienfuegos: “Donde mi pueblo me necesite ahí estaré presente. Soy del pueblo y vivo para él.” Por Dax Toscano


Al igual que Camilo Cienfuegos, Camila salió del pueblo,  al que ella se debe.

“En el pueblo hay muchos Camilos”,  dijo Fidel tras conocer la muerte del “Señor de la Vanguardia”. No se equivocó el Comandante de la Revolución Cubana: En los pueblos de América Latina hay muchos Camilos y, por supuesto, Camilas que, con su acción revolucionaria, han sabido dejar en alto el nombre del “Héroe de Yaguajay”.

Camila Cienfuegos, guerrillera fariana, también enciende el fuego de la revolución para forjar un presente y un futuro esplendoroso que permita la construcción de la Nueva Colombia.

De un corazón inmenso, cariñosa, solidaria y amable, Camila decide compartir algunos pensamientos sobre su vida y la lucha revolucionaria en Colombia, de la cual ella ya es parte, los mismos que los expresa en forma apasionada, sincera, decidida, defendiendo siempre los intereses del pueblo y de la organización a la que pertenece con orgullo: las FARC-EP.

Camila, cómo usted se vincula a la guerrilla. Cuéntenos un poco la historia de su vida guerrillera.

Mi vinculación fue en el año 1994. Era estudiante de segundaria, en una pequeña ciudad del valle del Cauca, fui militante de la Juco, allí realizaba,  misiones  como estafeta, presentábamos teatro, en los barrios más pobres, en los diciembres, los camaradas nos daban regalos y recorríamos las calles, entregando con tanta alegría  pequeños detalles a los niños, a los ancianos. También compartíamos buñuelos, natilla con mis compañeros de la Juventud Comunista. Allí aprendí a diferenciar entre  lo justo y lo injusto, y   conocí a las FARC- EP.

Hija de padres de origen paisa. Mi madre una mujer emprendedora. Entregada por completo a la educación de sus hijos, nos inculcó el respeto, la verdad, la honradez, la palabra, el compromiso y el amor por el trabajo.

Mi padre, era un hombre  muy estricto. Ambos pertenecían al Partido Comunista.

Desde muy joven he cuestionado la desigualdad, y buscando el camino que me indicara como construir un mundo de igualdad en lo humano; una sociedad donde todos y todas estén plenamente representados, busqué, y en  las FARC-EP lo encontré.

Su familia le ha brindado apoyo en este camino que usted escogió.

Ellos han sido incondicionales desde siempre.

Los medios de comunicación hablan negativamente del papel que cumplen las mujeres al interior de la insurgencia. Qué respuesta da usted a eso.

Esa interpretación del papel de la mujer en la guerrilla, es la que hacen nuestros enemigos como parte de la guerra psicológica.

En la realidad es todo lo contrario. Nuestro amor por el pueblo es la razón profunda de nuestra lucha. Esto determina y marca los perfiles psicológicos del guerrillero en las relaciones interpersonales y afectivas, las relaciones que se dan en la guerrilla, que son libres, plenas y desinteresadas, alejadas de los valores y las costumbres de la sociedad burguesa en descomposición que vive Colombia.

Qué actividades desarrollan fundamentalmente las mujeres dentro de las FARC-EP. Hay diferencias entre hombres y mujeres en este sentido.

En las FARC-EP hombres y mujeres desarrollan las mismas actividades: En lo político, en lo militar, en lo cotidiano. No existe ninguna diferencia. Esas diferencias las marcan las políticas de un sistema excluyente.

Somos unidades con igual compromiso, iguales deberes y derechos, lógicamente el nivel de desarrollo no depende del género, depende de las personas.

Qué mujeres luchadoras le inspiran en su actividad revolucionaria. Tuvo usted la oportunidad de conocer a la Comandante Mariana Páez o a Lucero Palmera, qué puede decirnos de ellas.

Las luchas y las experiencias de vida de miles de activistas, militantes y organizadoras del combate de las mujeres en el mundo entero: las mujeres vietnamitas, las trabajadoras de las fábricas, las plantadoras de arroz de la India, Manuela Cañizares -que es considerada el alma de la insurrección de 1809, en Quito-.  A las Madres de los desaparecidos argentinos, las luchadoras por la reforma agraria,  Manuelita Sáenz, Manuela Beltrán, Policarpa Salavarrieta, la Gaitana, las madres de los guerrilleros.  Aprovecho la ocasión para rendir homenaje a las compañeras del PKK asesinadas por los servicios de inteligencia turcos en Francia. En general, todas nuestras heroínas que han ofrendado su vida por la Colombia Nueva,  son mi mayor inspiración.

Conoce usted cuál es la situación de las mujeres prisioneras de guerra y políticas del Estado colombiano. Conoce a Marinelly Hernández Orozco y su postura digna frente al sistema judicial colombiano ante el cual se declaró en rebeldía. Qué puede decirnos al respecto y qué mensaje envía usted a las luchadoras farianas detenidas en las cárceles colombianas.

En las cárceles colombianas la tortura sicológica y física se utiliza como metodología para doblegar la voluntad revolucionaria, generalmente es vano el intento. Se trasgrede la libertad de opinión, el debido proceso, el derecho a    disentir del régimen oprobioso que desde hace décadas destruye Colombia, en síntesis, se violan los derechos humanos. Estamos enfrentados a una fuerza inhumana y recalcitrante para la anulación de la protesta.

A mis compañeras, quiero decirles que exalto su tenacidad de mujeres inquebrantables, comprometidas con el ideal revolucionario, bolivariano…, ¡la cárcel es otra trinchera de lucha! Y como dice Julián Conrado en su canción: Por más oscura que sea la prisión no dejará de brillar la razón.     

Qué piensa de Ingrid Betancurt, mujer que dijeron que se encontraba en pésimas condiciones por su retención por parte de las FARC-EP y que al final salió en perfectas condiciones.

Hoy en día no tenemos prisioneros de guerra en nuestro poder. El conflicto continua por la terquedad del señor presidente de Colombia de no aceptar un cese bilateral de fuego. Eso hace probable que en el futuro y como resultado del  accionar político militar se haga presente nuevamente la realidad de los prisioneros. Nosotros también tenemos en las mazmorras colombianas presos políticos. Esa es una de las razones de nuestra insistencia por un tratado de regularización de la guerra, que incluye necesariamente el canje de prisioneros.

Con relación al segundo punto, es ya de conocimiento público el nivel de manipulación informativa por parte del Estado, que en aras de truncar el camino hacia la reivindicación social informa con base a falacias. Ingrid, al igual que todos los prisioneros de guerra que teníamos en nuestro poder, se le reconocieron y respetaron todos sus derechos, prueba de ello es la forma distinta en la que salió Clara Rojas, circunstancia que guardaba más genuinidad, y con esto me refiero a que  existía una plena y evidente coherencia entre la esencia y la apariencia. 

Cuál es el momento más duro que ha tenido que pasar en la lucha revolucionaria.

La noticia de la muerte de nuestros camaradas, sin excepción. La arremetida paramilitar contra los pobladores, ver sus pequeñas casas como las consumían las llamas, el sueño de un pueblo en destrucción, sin quien arara la tierra, atendiera los animales. El saqueo de los paramilitares a las viviendas, a pequeñas tiendas, a mujeres y hombres violados brutalmente, los cadáveres, amordazados, con infinidad de torturas, las viudas con sus pequeños hijos, sosteniéndoles en brazos ahogadas en llanto y terror, la desolación de los pueblos, sin que nadie registrará qué ocurría a escasos kilómetros de los cuarteles de la policía. Allí también quedaron heroicos guerrilleros y guerrilleras dando su último suspiro por defender el pueblo, esto en el año de 1999. 

Usted considera que sería importante que dentro del Secretariado de las FARC-EP esté presente una mujer, claro está por méritos propios y no solo por su condición de ser mujer.

Por supuesto.

En la Colombia Nueva, con paz, justicia social y soberanía, que rol le gustaría cumplir.

Seguir luchando de la mano de mi pueblo. Donde mi pueblo me necesite ahí estaré presente. Soy del pueblo y vivo para él.

Un mensaje a las niñas y jóvenes y a las hijas e hijos de guerrilleros, cuyos padres no pueden compartir directamente con sus hijos e hijas pero que luchan por los hijos e hijas de todos los colombianos.

Hijos e  hijas de los guerrilleros del mundo.  Solo deseamos que no tengan que vivir  la situación que algunos de ustedes han vivido:   Constantes masacres (con lista en mano),  persecuciones, despojos de las pequeñas parcelas, los allanamientos a sus viviendas, la interceptación de llamadas telefónicas, el secuestro de los correos personales, los forzosos exilios  a los que son sometidos,  en países ajenos a sus culturas, inclusive sin identidad propia. De verdad, lamentamos lo que han padecido y que  la impunidad siga. No obstante, les recordamos con todo el amor de padres,  que están presentes en cada segundo de nuestra vida, que son elemento esencial de inspiración, al igual que los miles de hermanos colombianos por los que luchamos. Queremos que vivan en una patria digna, sinónimo de un amor genuino, fundamentado en la solidaridad. 

Por último, gracias a quienes en solidaridad se han hecho cargo de ustedes, supliendo la labor que a la distancia nosotros no podemos cumplir, personas que pese a las capturas ilegales de las que son víctimas, con las que el Estado trata de amedrentar, siguen ahí, incondicionales.

Mi mensaje es arriba las banderas de lucha, sin miedo de luchar por una revolución, que deberá ser social, y profundamente humana. Sin miedo de levantar la voz por la liberación de la humanidad. La liberación de hombres y mujeres. Cuando hayamos logrado ese triunfo ustedes nos ayudarán a construir ese nuevo país y esa nueva Patria.
La Habana, Cuba, 2013
 


miércoles, 9 de enero de 2013

Shirley Méndez: La lucha por un mundo libre con el color de las mujeres. Entrevista con Shirley, combatiente de las FARC-EP, por Dax Toscano





En Colombia, como en el resto del mundo, los medios de (in)comunicación tienen como constante la exhibición y exaltación de las mujeres como buenas amas de casa, excelentes esposas, exuberantes modelos, famosas actrices o exitosas empresarias. 

Es una visión patriarcal, sexista, falocéntrica y burguesa de la mujer, a la que se la considera como “buena” cuando cumple con los roles impuestos por el sistema de dominación masculino y cuando es una exponente fiel de la ideología capitalista.  

En la gran industria mediática, la mujer trabajadora y la luchadora revolucionaria, no ocupan espacio alguno, a no ser que sea para denigrarlas. 

El poder tiene miedo a las mujeres que se levantan contra el orden establecido. 

Tal es el caso de Shirley Méndez, combatiente de las FARC-EP, aguerrida guerrillera con un profundo sentido humano y un corazón inmenso cargado de amor por el pueblo. 

La vida de Shirley tiene, además, algo muy especial, puesto que fue la compañera del Mono Jojoy, como se conocía al Comandante Jorge Briceño asesinado por las bombas criminales del Estado colombiano.

Shirley forma parte de la Delegación de Paz de las FARC-EP que en La Habana, Cuba, hoy se encuentra librando una dura batalla para poner fin al conflicto desatado por el Estado gansteril colombiano, hace ya más de cincuenta años. 

La “llanerita” da respuesta a algunas preguntas que se le formulan: 


Shirley Méndez, es su nombre o lo adoptó en homenaje a alguna camarada revolucionaria.

Es un nombre adoptado,  en el frente 15, cuando me incorporé a la montaña. Yo había pensado ponerme Yira Castro en homenaje a una revolucionaria del Partido Comunista colombiano, pero me dijeron que ya había varias Yiras. Entonces el camarada que me había ingresado, me dijo “que  mejor  otro nombre, por ejemplo  Shirley, ¿qué tal? No hay ninguna en el frente.” A mí me gustó. Desde entonces adopté el nombre de Shirley.

Cuéntenos cómo fue su niñez, qué recuerdos hermosos tiene de su infancia.

Mi niñez fue feliz, rodeada de mucho amor de mis padres, de mis dos hermanitos, de mis tíos. No conocí a mis abuelos porque mis padres, cuando comenzó la violencia en el Tolima, salieron a refugiarse al departamento del Caquetá.  Allá donde yo nací. Mis abuelos maternos ya habían muerto. El amor  reinaba en la familia, las vacaciones que  disfrutábamos en el campo o donde algún familiar, son recuerdos que evocó de mi niñez.

Cómo era el lugar donde vivía, qué juegos le gustaba.

Viví en el campo, en una finca con un aire campestre muy acogedor. Porque vivir en Florencia no nos  agradaba. Luego dos años en Armenia, donde terminé la primaria y comenzaba la segundaria. Para allá había acordado mi madre mandarme, para que no me fuera para el M-19, porque siendo muy niña, de diez años, estaba entusiasmada por irme. La razón fue que varios de mis compañeros de curso se habían incorporado a esa organización. Mi familia, que simpatizaba con el Partido Comunista, no estaba de acuerdo que me fuera. Ellos querían que yo estudiara, pero yo había tomado la decisión de irme. Allá en el Caquetá tengo mis caros recuerdos. Me gustaba jugar a desfilar, colocándome los zapatos de mi mami. O a esconderme, para que mis amiguitos y mis hermanos me buscaran.

Háblenos de su familia, recuerda algún momento especial, alguna reunión en el núcleo familiar que le guste rememorar.

Mi familia es  mezcla de tolimense con huilense,  mi padre del Tolima, mi madre del Huila, tengo dos hermanos, soy la menor. Alternábamos la finca con la ciudad de Florencia. Era un hogar muy humilde, lleno de amor,  respeto, aunque mi padre era bastante colérico; mi madre,  una mujer sencilla, respetuosa. Nos llenaron de afecto, nos enseñaron la ternura, el carácter, la honradez, el respeto, comenzando por el más chico hasta el anciano, la justicia y la tolerancia. El momento que más  recuerdo, cuando era la hora de salir para la escuela, cuando apenas tenía 4 añitos. Mi papá siempre me sentaba en la piernas para  el desayuno, a mí no me gustaba comer temprano y menos si se trataba de caldo. Por ser la última, era a la que más consentían.  La reunión familiar como tradición colombiana, la comida de noche buena y fin de año, son otros recuerdos.

Cuándo conoce usted a las y los combatientes farianos. Qué le impulsa a ingresar a las filas de las FARC-EP.

Fue en la época del 80. Se decía por la radio que la guerrilla de las FARC había tomado el municipio de Puerto Rico, Caquetá. Se hablaba mucho del campo socialista, del triunfo de la Revolución Nicaragüense, de la Revolución Cubana. Yo quería conocer la guerrilla, pero eso no fue posible, hasta cuando en el año 82, para una navidad, fuimos a la finca de un tío por los lados de Remolinos del Caguán. Es ahí donde tengo el primer contacto con ellos. Me impactaba las enfermedades que se sufrían en Colombia así como la falta de vivienda, salud, educación, alimentación, ver niños y ancianos en las calles descalzos. No había, ni hay igualdad. Mis padres me hablaban de la violencia que inicio cuando la muerte de Gaitán. Todo eso me ponía a pensar cuándo nosotros íbamos a ser libres como Cuba y Nicaragua. Yo quería estudiar medicina, pero luego pensaba, si estudiaba como iba a hacer para conseguir un trabajo. Me estaba leyendo un libro nicaragüense que se llamaba “Todas Despiertas”, el cual me motivo muchísimo sobre la importancia del trabajo de la mujer en la lucha  revolucionaria y es ahí cuando tomo la decisión de irme para la montaña, porque descubrí que ahí era donde me podía realizar  como mujer.

Cuántos años de lucha lleva al interior de las FARC-EP.

Yo me incorporo a la lucha revolucionaria, en las FARC-EP, en el año 1983, al frente 15, en el bloque SUR. Ahí  permanecí 3 años y luego salí de traslado en una columna para conformar el Bloque Oriental, al mando del Comandante Jorge Briceño. Eso es por el año 1986. Siempre estuve al  mando de él, hasta el día que lo asesinaron.

Qué anécdotas recuerda de sus primeros años en la guerrilla. Fue difícil el proceso de adaptación a la vida militar dentro de las FARC-EP.

Bueno, eso si no falta, porque la verdad, a pesar de haber estado en el campo, es muy distinta la vida  en  la montaña. Pero sin duda, lo que más recuerdo, además porque me hacían muchas bromas, y es que tenía como unos 15 días de haber ingresado, era mi primer turno de  rancha (cocina). Se hizo una maniobra de desalojar el campamento, pues yo no me levanté porque estaba de servicio, seguí acostadita, cuando llegó el mando revisando que nadie se quedara, y  me dice “¿tú te piensas quedar?…nos vamos, recoja todo. Dije no… yo  soy ranchera, pero me tocó levantarme e irme y,  para completar, me caí en el cruce de un caño, todos se  reían. Lo más difícil fue acostumbrarme a desayunar temprano, el baño colectivo con tan poco tiempo,  las marchas, el morral pesado, le tenía miedo a la oscuridad de la montaña, pero bueno, todo eso fue pasando. Me esforcé porque quería un cambio.  Sabes que cuando uno quiere hacer  algo, pone de su parte para superar todas estas flaquezas. Desde luego que mis compañeros me ayudaban mucho, porque en las filas guerrilleras existe mucha solidaridad.

Conoció usted a Manuel. Qué características tenía él.

En 1987 conocí al comandante Manuel Marulanda. Por ese acercamiento con el comandante Jorge, siempre tuve la oportunidad o estimulo de pasar varias veces cerca de él. Además, porque siempre quise conocerlo, me hablan desde muy niña de él. El Mono me contaba muchas anécdotas y travesuras  que él le hacía cuando andaba con el camarada. Lo que más me impresiono, su  disciplina, sencillez,  humildad, respecto y humor, un hombre inteligente.

Cómo conoció al Comandante Jorge Briceño. Qué le impacto más de él.

Lo conocí en 1983, revolucionario carismático. Hombre  de corazón noble. Yo apenas tenía 3 meses de ingreso y hacia el curso básico.  Me impactó la franqueza, el humor, el arrojo, la lucidez para hacer y decir las cosas, la sencillez,  que se fue desatando en un enorme potencial político y militar que lo proyectó como una de las figuras cimeras de la guerra de guerrillas en Latinoamérica.

Existen diferencias entre el amor revolucionario, guerrillero y otros amores. Cuéntenos cómo fue ese amor entre usted y el Mono Jojoy.

El revolucionario, siente un profundo amor  por su pueblo, por la causa, por todos los problemas que aqueja a la sociedad y al mundo víctimas del imperio. El amor revolucionario se expresa en la solidaridad, en el respecto hasta por sus adversarios. Nuestros amores fueron muy sólidos, nos unía el mismo sentimiento de Patria. Era enfermera desde que llegue a su unidad,  cumplía algunas tareas por la ciudad y luego como radista.

Dicen que el Comandante Jorge Briceño era jodedor o como ustedes dicen, un “mamador de gallo”. Recuerda alguna anécdota en este sentido.

Él siempre tenía encendida esa chispa del humor. Como él no  gustaba de los perros, en un desplazamiento que hacíamos con el camarada Manuel, le mando a botar el perro a un caño, porque no dejaba pasar la gente. Dijo “echen ese perro al caño para que de paso” y le contesta el camarada que lo alcanzó en ese instante. –Hola Jorge, deje que ese animal pase- a él le dio mucha pena, por el respeto que se tenían, pero le causó mucha risa y se lo  contaba a los demás camaradas riéndose.

Más allá de los vínculos revolucionarios entre usted y el Mono, como se expresaba esa unidad vital entre ustedes dos.
 
Me ayudó mucho desde un principio que fuimos amigos en todo el sentido de la palabra, lo aprendí a querer por encima de lo personal como mi comandante, como lo que él representaba para un colectivo, para un pueblo, todo eso hizo que lográramos construir no solo una relación, sino una sólida amistad. Él  no solo fue el amor de mi vida. Era mi amigo, mi comandante, mi compañero, mi confidente, mi padre.

El Che decía “Hay que endurecerse, pero sin perder la ternura jamás”. ¿Era tierno en medio de la lucha el Mono Jojoy?

Sí, un hombre estricto, pero dotado de una  ternura impresionante, un hombre que se jugaba todo por la igualdad, un hombre que sufría por la indiferencia de los poderosos hacia el pueblo. Era un ser excepcionalmente tierno, amable, dotado de los más lindos valores que pueda tener un ser humano. Duro sí, pero arropado de una ternura genial.  

El Comandante Jorge es ejemplo del Hombre Nuevo del que habló el Che. Cuáles virtudes de él quisiera exponer en este momento.

Sí, por su esfuerzo permanente para superarse. Fue un estratega sin par, el que se esforzaba todos los días por aprender cosas que le dejaran enseñanzas para, a su vez, transmitirlas al colectivo y así educar a sus hombres y mujeres. El Comandante Pablo Catatumbo fue el amigo que le inculcó e incentivo el gusto por la lectura, así como por la escritura. Jorge se caracteriza por  el respecto a los demás, por su firmeza, por ser un hombre de corazón noble y alegría espontánea, que nunca, ni en los momentos difíciles, perdió la calma. Hablaba con mucha propiedad de todo y conocía a nuestra linda Colombia en su totalidad. Jorge se autoeducó, puesto que él alcanzó hasta el segundo año de primaria, pero siempre se imponía tareas para aprender de geografía, economía, etc. Fue un hombre recto, franco.

A usted qué cosas le llenan desde el punto de vista “espiritual”. Qué tipo de música le gusta escuchar, qué le gusta bailar, qué le gusta leer. Le agrada la poesía.

El entorno en el que vivo con mis compañeros de lucha, el empuje del pueblo cuando reclama paz. Me encanta toda la música, pero en especial salsa, llanera, el reggaetón y la música romántica. Me gusta bailar salsa, aunque no soy bailarina, y también música tropical.  Me encanta la lectura en general. Y claro, que me gustan la poesía, las crónicas y los versos.

Cuál es la sociedad que usted imagina para Colombia y qué papel usted cumpliría en esa sociedad.

Una sociedad libre, con igualdad para todos, con pan, con techo, donde en los rostros de las niñas y los niños, de los ancianos, mujeres y hombres se refleje la armonía, donde el llanto del dolor pase a la sonrisa. Una sociedad donde no  haya más intervenciones de las transnacionales, ni el despojo de sus tierras.

Qué mundo aspiran construir las FARC-EP para las niñas y los niños. Usted qué aportes daría para brindarle a la niñez un mundo que, como dice Julián Conrado, gire alrededor del amor.

Un mundo sin odios, sin rencores, donde las niñas y niños aprendan a ser honrados,  donde de verdad reine el amor. Amor por los valores propios como seres humanos, porque los niños son la esperanza del futuro, donde no solo tengan derecho a vivir la niñez los hijos de unos pocos, donde las y los de los pobres también sientan y tengan ese legítimo derecho de  vivir una niñez sin maltratos. Hasta la vida misma para construir ese mundo.

Podría contar a las y los lectores de esta entrevista como son las mujeres guerrilleras.
 
Las mujeres guerrilleras somos dignas, como  combatientes  somos  revolucionarias,  luchamos para ayudar a construir un país que le brinde a la mujer  derechos, libertad, igualdad; mujeres dispuestas a dar la vida misma por la causa que un día decidimos defender. Somos la esperanza de miles de mujeres que son víctimas de una sociedad capitalista, donde a la mujer la ven como un instrumento de comercialización. Porque como dijo el comandante Fidel Castro, “cuando en un pueblo pelean los hombres  y pueden pelear las mujeres, ese pueblo es invencible”.

Qué mensaje da a las niñas y a las jóvenes de Colombia y de Latinoamérica.

Nosotras somos parte de ese pueblo, luchamos en contra del capitalismo que  trata de negar y destruir todos los valores humanos y sociales, luchamos para hacer posible otro mundo, un mundo libre con el color de las mujeres. A las niñas y las jóvenes que crecen en un mundo de explotación, donde diariamente son pisoteados sus derechos, les digo que en las FARC se formaran dignas, con espacios de libertad,  sin maltrato por su condición de mujeres, formarán en todo su esplendor. Por tanto, la solidaridad universal es ahora mucho más significativa y valiosa para construir un mundo mejor.

La Habana, Cuba, 2013